Cómo abonar la planta de cafe
Planta de interior de cafeto
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Para asegurarse de que obtiene los mejores resultados posibles de sus esfuerzos agrícolas, debe asegurarse de que el suelo contiene nutrientes específicos en las cantidades correctas. A continuación te explicamos cuáles son estos nutrientes, cómo pueden afectar a la calidad del suelo y cómo evitar errores que podrían repercutir negativamente en la producción de café.
Las plantas de café reciben carbono, hidrógeno y oxígeno del aire y el agua circundantes, y nitrógeno, potasio, fósforo, calcio, magnesio y azufre del suelo donde están plantadas. Estos nueve elementos se denominan macronutrientes, y se necesitan grandes cantidades para que una planta de café prospere.
Un cafeto sano no sólo necesita nutrientes. Su acidez también necesita estar en un nivel óptimo de pH, que se sitúa entre 4,9-5,6 pH. Entre estos niveles, la planta puede absorber mejor los nutrientes, lo que se traduce en más cerezas de café y menos problemas relacionados con plagas y enfermedades.
Si tu suelo es demasiado ácido, puedes neutralizarlo añadiendo cal calcárea, o dolomítica si también carece de magnesio. La baja acidez también puede ser un problema, y suele equilibrarse con un abonado frecuente.
¿Cuál es el mejor abono para un cafeto?
Este árbol necesita un abono rico en nitrógeno. Los abonos para rosas y cítricos son excelentes para mantener sano tu cafeto. También puedes abonar con posos de café, ya que contienen exactamente los nutrientes que necesita el árbol.
¿Qué nutrientes necesitan las plantas de café?
Las plantas de café reciben carbono, hidrógeno y oxígeno del aire y el agua circundantes, y nitrógeno, potasio, fósforo, calcio, magnesio y azufre del suelo donde están plantadas. Estos nueve elementos se denominan macronutrientes, y se necesitan grandes cantidades para que una planta de café prospere.
¿A las plantas de café les gusta que las rocíen?
¿A las plantas de café les gusta que las rocíen? Sí, a las plantas de café les gusta la humedad alta, por lo que rociarlas con frecuencia debería ayudar a conseguirlo.
Mejor abono para cafetos pdf
En el cultivo del café, los principales nutrientes son el nitrógeno, el fósforo y el potasio. El calcio, el magnesio y el azufre son nutrientes secundarios, mientras que el hierro, el manganeso, el cobre, el zinc, el molibdeno, el boro, el sodio y el cloro son micronutrientes. Veamos cuál es el mejor abono para los cafetos.
Los abonos equilibrados son todos los nutrientes esenciales que se aportan en cantidades adecuadas para mantener el crecimiento y la producción de la planta. Es importante mantener el pH máximo a través de la hierba limón para la gestión de nutrientes en Café. Si no se mantiene el pH adecuado, las plantas no utilizarán eficazmente los fertilizantes aplicados.
Para obtener el mejor rendimiento del Cafeto, es esencial una gestión sostenible de la fertilidad del suelo. El programa de fertilización depende de las características inherentes del suelo y del nivel de rendimiento esperado. El análisis del suelo debe realizarse al menos una vez cada 2-3 años para el uso de cal y fertilizantes. Los cafetos necesitan mucha potasa, nitrógeno y un poco de ácido fosfórico. Esparza el abono en un anillo alrededor de cada cafeto y tenga cuidado de no poner nada en sus tallos, ramas u hojas.
Abono para cafeto arábica
El café (Coffea arabica L.) es uno de los cultivos perennes más valiosos del mundo. Bajo un sistema convencional de producción de café, el ciclo del cultivo se compone de cuatro etapas de crecimiento: (1) la etapa de germinación dura 2 meses, (2) la etapa de vivero dura 6 meses, (3) después del trasplante al campo, la etapa vegetativa dura de 12 a 15 meses, y (4) la etapa reproductiva continúa durante 4 o 5 años hasta que la productividad disminuye (Arcila, 2007) y se debe iniciar otro ciclo de cultivo mediante la poda del tallo o la renovación total.
La mayoría de los estudios de fertilización se han realizado durante la etapa reproductiva pero poco se ha reportado para la etapa vegetativa, la cual es igualmente importante ya que el vigor temprano influye en la productividad posterior (Salazar, 1996).
El nutriente más indispensable para la producción de café es el nitrógeno (N), y se producen pérdidas de rendimiento de hasta el 60% cuando no se aplica fertilizante de N durante la etapa reproductiva (Sadeghian, 2008). Por lo tanto, el apoyo a los cultivos de café durante la etapa vegetativa consiste principalmente en niveles adecuados de N, seguidos en ciertos casos por fósforo, potasio, calcio o materia orgánica (Sadeghian, 2008). Para garantizar que las necesidades de N se satisfacen adecuadamente, se suelen aplicar grandes cantidades de N durante la fase vegetativa, que a menudo superan la dosis máxima requerida por la planta.
Las hojas del cafeto se vuelven verde claro
Una humedad elevada, luz indirecta brillante y un suelo húmedo, rico, con buen drenaje y ligeramente ácido son los aspectos más importantes del cuidado del cafeto en interiores. Proporcione temperaturas suaves de entre 18ºC y 27ºC, abone cada 2-4 semanas durante la temporada de crecimiento y vigile que no haya plagas.
La luz: Las plantas de café prefieren la luz solar moteada o plena luz solar en las latitudes más débiles. En realidad, son plantas del sotobosque (que crecen bajo la cubierta forestal) y no prosperan bajo la luz directa del sol. Pueden adaptarse a condiciones de poca luz, pero su crecimiento será más lento.
Temperatura: La temperatura media óptima para las plantas de café es una temperatura diurna de entre 21 y 27 grados Celsius y una temperatura nocturna de entre 18 y 21 grados Celsius. Las temperaturas más altas (más calientes) pueden acelerar el crecimiento, pero las temperaturas más altas no son ideales para el cultivo de plantas por sus granos. Los frutos deben madurar a un ritmo lento y constante.
Humedad: Como estas plantas crecen de forma natural en las laderas de las montañas tropicales, prosperan en condiciones muy húmedas que suelen recibir mucha lluvia y niebla. Un nivel de humedad del 50% o superior debería ser suficiente. Si el aire es demasiado seco, los bordes de las hojas pueden empezar a ponerse marrones. Nebulice la planta con frecuencia para elevar el nivel de humedad.